Limpieza de FAPS en Móstoles

El filtro antipartículas es un elemento clave en el sistema de escape de los vehículos. Su función es retener las partículas contaminantes antes de ser liberadas al medio ambiente. Sin embargo, con el tiempo, estas partículas pueden obstruir el filtro y reducir su eficacia. La limpieza periódica del FAP es esencial para garantizar su correcto funcionamiento y evitar problemas en el motor, como pérdida de potencia o aumento de consumo de combustible, así como averías en el turbo al no poder desahogar los gases correctamente.

En Móstoles, contamos con un equipo de profesionales especializados en la limpieza de FAPS. Nuestro proceso es sencillo y eficiente, y garantiza una limpieza exhaustiva del filtro. Primero, retiramos el FAP del vehículo y le desmontamos las sondas y sensores antes de nada. A continuación, lo sumergimos en la piscina de ultrasonidos para que la cerámica vaya preparándose y las partículas ablandándose para el siguiente proceso que consistirá en la máquina de limpieza por recirculación de fluido, está máquina está diseñada para arrastrar todas las partículas incrustadas en la cerámica mediante la recirculación de un fluido a una temperatura de 80 grados, primero en el sentido contrario a los gases de escape y posteriormente en el otro sentido para terminar de arrastrar todas las partículas posibles, llegando incluso en ocasiones a los valores de un FAP completamente nuevo una vez instalado en el vehículo.

Finalmente, instalamos el FAP de nuevo en el vehículo y realizamos una serie de pruebas para comprobar su correcto funcionamiento, así como que todos los sensores y sondas están midiendo correctamente y se ajustan a los parámetros de un FAP en perfecto estado. También revisamos que el resto de sistemas del vehículo que se encuentren funcionando correctamente sin generar ningún código de avería en la diagnosis por OBD.

La limpieza de FAPS en Móstoles ofrece una serie de beneficios importantes para los propietarios de vehículos. Algunos de los más destacados son:

• Mejora del rendimiento del motor: Al eliminar la obstrucción del filtro, el motor funciona de manera más eficiente, sin ver mermada su potencia y sin aumentar el consumo de combustible por constantes regeneraciones.
• Reducción de emisiones contaminantes: Al garantizar el correcto funcionamiento del FAPS, se reduce la cantidad de partículas contaminantes liberadas al medio ambiente.
• Protección del motor: La limpieza periódica del FAPS evita problemas en el motor, como pérdida de potencia o aumento de consumo de combustible, protegiéndolo y prolongando su vida útil, así como la del turbocompresor, que es el principal afectado al no conseguir desahogar los gases correctamente.
• Ahorro de dinero: Al mantener el correcto funcionamiento del FAPS, se evita la necesidad de realizar reparaciones costosas en el futuro.